En los Estados Unidos de hoy día, la gente está en contra de descubrir cómo beber de su propio manantial.
Lynn R. Laurence
Parte del problema de estar "apegado/a" -a pareja/familia, a sustancias químicas/alcohol, a la comida, al sexo, al trabajo/juego- consiste en buscar fuera de uno/a mismo/as algo que solucione la vida. A veces, incluso se cree que Dios o un poder superior a uno/a,(prácticas "religiosas" o de moda), puede hacerlo todo bien, que sólo tenemos que tumbarnos y esperar a que suceda; pero no es así.
Cuando reconocemos que la fuerza que creemos, que está fuera de nosotro/as, está realmente en nuestro interior, empezamos a percibir y a sentirnos mejor, pleno/as con la vida y lo que nos ha tocado.
La curación es la experiencia de la unidad de todas las cosas y nuestra capacidad para ocupar nuestro lugar en esa unidad.
Para nuestra sociedad, ha sido muy destructivo nuestra actitud de estar orientados/as hacia el otro (ocuparnos de nuestra familia, pareja, su familia, el trabajo, casi de manera servil, des-atendiéndonos a nosotro/as mismo/as). El cambio a centrarnos en el «yo», en nosotros/as mismos/as, tampoco ha servido de mucho.
Reconocer que somos uno/a con todo y aceptar nuestro lugar en esa unidad nos hace actuar dentro y fuera de nosotros/as.
Reflexión para Hoy:
Mi sed sólo puede ser saciada a partir de mi propio manantial y mi toma de conciencia de que dicho manantial es mío y compartido por todo el mundo.
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